Paulo “Speedy” Gonçalves tuvo su merecida despedida en casa con una caravana multitudinaria de motos y quads. Miles de personas se concentraron en las puertas del cementerio para brindarle un sentido homenaje
El último adiós al gran Paulo Gonçalves estuvo cargado por una emoción pocas veces vista. Ante la pérdida de un referente para jóvenes y amantes del motocross, cientos de riders tomaron sus propios vehículos, ya sea de competición o de uso diario, para formar parte de una última caravana en honor al portugués.
Esposende, su ciudad natal, fue el epicentro del homenaje, donde miles de personas esperaban en la puerta del cementerio a que llegue el cuerpo del piloto fallecido durante la séptima etapa del Rally Dakar.
Benjamin Pereira, alcalde del pueblo que vio nacer a Gonçalves, destacó que el piloto era un “ídolo” en esa localidad. No solo por sus grandes logros y por representar a toda una nación, sino también por su gran humildad.
Una vez arribada la caravana al Cementerio de Esposende, hubo un minuto de silencio. Luego, la familia y amigos del piloto pudieron continuar con el rito.
Um minuto de silêncio à chegada do corpo de Paulo Gonçalves à Câmara de Esposende 😔
Centenas de motards, amigos e fãs do piloto que morreu no Dakar acompanharam o cortejo fúnebre.#paulogonçalves #dakar #piloto #motards pic.twitter.com/WDgVEVshGG
— tvi24 Últimas (@tvi24ultimas) January 23, 2020
Video de portada: Pedro Figueiredo.