El piloto uruguayo Álvaro Coppola logró el gran objetivo de culminar el Rally Dakar y celebró en el podio junto al equipo Med Racing Team de Argentina. Además, cumplió la promesa que le hizo a la familia de Matías Carballo, su compatriota y compañero de equipo que falleció en 2024.
Finalmente, la garra charrúa se impuso en Arabia Saudita. Álvaro Coppola pudo terminar la gran odisea de más de 7500 kilómetros de carrera que significaron las dos semanas del Rally Dakar 2025.
Fueron 14 días de competencia extrema, con una semana que comenzó con una primer etapa muy larga y peligrosa, siguió con la etapa de 48 horas y luego tuvo otra etapa maratón que fue un verdadero filtro.
Así, el representante uruguayo llegó al día de descanso para afrontar las últimas siete etapas de competencia, donde el cansancio acumulado se haría notar, además del calor del Empty Quarter que fue protagonista en las tres jornadas finales.
Fue una verdadera odisea para Coppola, que siempre tuvo en mente la llegada a meta, y la promesa que le hizo a un viejo amigo. Antes de partir rumbo a Arabia Saudita, Coppola recibió una bandera de Uruguay muy especial, propiedad de la familia de Matías Carballo.
Matías perdió la vida el lunes 2 de septiembre de 2024 mientras se encontraba entrenando en El Nihuil, Mendoza, junto a Álvaro Coppola y los integrantes del equipo. El sueño de Carballo era poder correr el Dakar representando a su nación, por lo que Álvaro tomó la posta y le prometió a su familia llevar una bandera con las firmas, nombres y deseos de los Carballo.
“Le prometí a la familia estar acá con la bandera” dijo Coppola en la largada del Dakar, y luego cumplió llevando la misma bandera hacia lo más alto del podio de llegada.
Sin dudas, fueron dos semanas a pura entrega para Álvaro, que logró colgarse su segunda medalla dakariana y superar una de las ediciones más duras del Rally Dakar.
Texto: Luciano Schiffer – Somos Dakar
Fotos: Fotop