El piloto asturiano viajó esta semana a Sudáfrica donde el Equipo Toyota le dio la posibilidad de probar durante dos días la Hilux que ganó la última edición del Rally Dakar. Mirá los videos y las fotos.
El desierto de Kalahari, en Sudáfrica, fue el escenario donde Fernando Alonso se subió por primera vez a la Toyota Hilux del Gazoo Racing. Allí, el asturiano viajó casi en secreto para sumar sus primeros kilómetros a bordo de un vehículo muy diferente a los que está acostumbrado.
Así, el piloto de F1 y del WEC, próximo a correr nuevamente las 500 Millas de Indianápolis, confirmó los rumores que habían comenzado luego de que Nasser Al Attiyah, último campeón del Dakar, enviara la invitación al español en declaraciones a la prensa.
No hay dudas del talento de Fernando Alonso para adaptarse a cada categoría del mundo motor. Sin embargo, cuando comenzaron a escucharse las voces que acercaban al doble campeón del mundo a la disciplina offroad, algunos se preocuparon por las grandes diferencias entre los vehículos.
Es por eso que, sin una fecha de debut, ni compromisos a futuro con Toyota, Alonso viajó a Sudáfrica y, durante dos días, probó la Toyota Hilux 4×4 del Gazoo Racing SA. Es el mismo vehículo con el que Al-Attiyah le dio a la marca japonesa su primer título de Dakar en 2019, con el Nº 301 en sus costados.
Esta vez, a bordo estuvieron Fernando Alonso y Giniel De Villiers, el experimentado piloto dakariano que es ya considerado un maestro al volante de cualquier coche offroad. El sudafricano corrió con Nissan, Volkswagen (dos subcampeonatos) y desde el 2012 lo hace con Toyota, cuyo mejor resultado fue en 2013 y 2015 con dos 2º puestos en la general.
De parte de Toyota, Glynn Hall, responsable del equipo, señaló: “Normalmente no tienes a un bicampeón de Fórmula 1 en un coche en un tramo así. Hubo mucho estrés por nuestra parte porque queríamos que todo fuese perfecto y es un día muy especial” señaló.
“Fernando se ha adaptado muy rápido, es lo que esperábamos. Ha tenido la mentalidad adecuada, ha ido de manera progresiva con la velocidad. Disponemos de dos circuitos aquí, uno de ocho y el otro de 17 kilómetros. Fernando decidió, en el quinto intento, ir a por el de 17 con las rutas de las dunas y lo hizo por primera vez. Es muy especial, pero todavía nos queda mucho camino y ésta es una disciplina muy difícil, vamos paso a paso”, detalló Hall sobre el asturiano.
Giniel De Villiers también contó lo que fue compartir el vehículo con Alonso: “Dimos una o dos vueltas en el coche, simplemente para enseñarle los caminos. Sabe muy bien cómo pilotar él mismo, sólo tiene que acostumbrarse al coche, al terreno, leer los baches, ver cómo pasar por las dunas porque es algo a lo que obviamente no está acostumbrado”.
Fotos: Prensa Toyota.
Texto: Lucho Schiffer, Somos Dakar.
